Agentes de la Policía Nacional de Málaga han detenido a un hombre de 36 años acusado de incitar a un menor de once años a desnudarse a través de videollamadas. El arrestado, que se conectaba a redes wifi de sus vecinos, supuestamente se ganó la confianza del niño en una red social y consiguió que le mostrara sus genitales utilizando una aplicación que permite conversaciones de chat, voz y vídeo.
Según informa la Policía, la investigación se inició a raíz de la denuncia presentada por el padre del menor sobre que su hijo había mantenido conversaciones a través de Internet y le habían solicitado que le enseñara sus partes íntimas. Esta petición, a la que finalmente el niño accedió, se realizó mediante una aplicación que permite conversaciones de chat, voz y vídeo a través de Internet, de libre acceso para el usuario y cuyo registro es totalmente gratuito.
Una vez conocidos los hechos, los agentes analizaron el contenido del ordenador portátil facilitado por el padre y utilizado por el menor. Del equipo extrajeron conversaciones en las que se observaba la insistencia por parte del usuario para que el niño le mostrara sus genitales a través de la cámara web. También se vio que, tras aceptar las peticiones, el hombre se burló de su víctima.
Continuando con las investigaciones, solicitaron diversos mandamientos judiciales para identificar a los titulares de las líneas utilizadas para conectarse al perfil desde el cual se habían mantenido conversaciones con el niño.
Comprobaron que todas las conexiones se encontraban en un área muy reducida por lo que pensaron que el autor podría haber "hackeado" las contraseñas de acceso a la conexión wifi de sus vecinos para conectarse a Internet a través de ellas.
Finalmente, los agentes identifican y localizan al presunto autor de los hechos, por lo que ha sido detenido en una localidad malagueña, tras la investigación ha sido realizada por el grupo de Delitos Tecnológicos de la Comisaría Provincial de Málaga.
Además, los agentes han registrado su domicilio e intervenido discos duros y un teléfono móvil, todo ello pendiente de análisis.
Desde la Policía aconsejan a los padres asistir al menor en su navegación por Internet, tutelándolos "como lo hace en cualquier otra actividad cotidiana". Además propone hablarles de "los peligros del chat", donde se pueden confundir, al chatear con supuestos amigos que no resultan tales, prestando especial atención a los contenidos sexuales.
Asimismo, recomienda que no se les permita que envíen sus fotos o de su familia ni cualquier información sobre ellos sin la autorización de sus padres y que consensúe con el hijo ciertas normas a seguir en Internet.
