Doce esculturas de bronce de más de tres metros de altura que representan las cabezas de los animales del zodiaco chino. Es la obra del artista chino Ai Weiwei que llega al Centro de Arte Contemporáneo de Málaga. Bajo arresto domiciliario durante 81 días por su oposición al gobierno chino, el artista quedó libre el 22 de julio pasado.
Conocido por su carácter reivindicativo, denuncia sin censura a través de sus trabajos la represión en China. Aunque no ha acudido para la presentación de su muestra, se espera que visite Málaga pero la fecha sigue siendo un misterio.
Una exposición inédita en España, inspirada en la fuente-reloj del palacio de verano de Yuaming Yuan, arrasado durante la Segunda Guerra del Opio, y con la que el artista denuncia el expolio y saqueo del patrimonio chino. Su ánimo disidente, al que da rienda suelta sin límites través de internet y las redes sociales, invita a remover conciencias y buscar las raíces del país.
Durante los días que tenido prohibido salir de su país, sus obras, sin embargo, han visitado museos de todo el mundo. Ahora llegan a la capital de la Costa de Sol donde el Ayuntamiento y el regidor popular, Francisco de la Torre, esperan que contribuya a dinamizar internacionalmente la imagen de la ciudad como polo cultural.