La Inspección Pesquera de la Junta de Andalucía ha decomisado en el mercado de mayoristas de Málaga, Mercamálaga, un total de 1.028 kilos de pescado y marisco inmaduro o que carecía de la documentación que acredita su trazabilidad.
El decomiso se ha llevado a cabo en una operación de control desarrollada durante la descarga del pescado en Mercamálaga, en la que los inspectores han localizado 533 kilos de boquerón con un 20 por ciento de inmaduros, 153 kilos de atún rojo y 342 kilos de distintas especies de pescado y marisco sin documentación.
Según ha informado hoy la Junta en un comunicado, el pescado incautado procedía de Ayamonte e Isla Cristina (Huelva) y la intervención ha motivado la incoación de tres actas de infracción a transportistas.
El producto decomisado que era apto para el consumo se ha entregado al banco de alimentos Bancosol para su distribución, y el que no cumplía estas condiciones se ha destruido.
La actuación de la Inspección Pesquera de Málaga se enmarca en las labores de vigilancia y control contra la captura y venta de inmaduros, una actividad ilegal que perjudica la sostenibilidad de los recursos marinos.
Por su parte, la falta de documentación y trazabilidad impide disponer de toda la información del producto, con lo que no se garantiza el derecho de los consumidores a conocer exactamente qué es lo que compran y de dónde procede, según la Junta.
