La Diputación de Málaga ha recordado este martes a las 142 víctimas malagueñas del campo de concentración de Mauthausen con una ofrenda floral y la lectura de un manifiesto en la escultura 'Sombra de luz', dedicada a estos fallecidos, situada en los jardines de La Térmica. El pasado 5 de mayo se cumplieron 73 años de la liberación del campo nazi.
Siguiendo las recomendaciones de la Asamblea General de Naciones Unidas, los días 8 y 9 de mayo son consideradas las fechas indicadas para el recuerdo y la reconciliación como homenaje a las víctimas de la II Guerra Mundial. El propósito de este manifiesto, leído por el viceportavoz del equipo de gobierno, Francisco Oblaré, es no olvidar nunca a las 142 víctimas malagueñas del holocausto de Mauthausen.
Oblaré ha estado acompañado por los portavoces de PSOE, Francisco Conejo; IU Para la Gente, Guzmán Ahumada; y Málaga Ahora, Rosa Galindo; además de la viceportavoz de Ciudadanos, Teresa Pardo, y otros miembros de la Corporación provincial.
Después de 73 años del final de la II Guerra Mundial, pese a que "han podido curarse heridas, quedan cicatrices que recuerdan cómo somos capaces de sublimar el dolor en favor de una convivencia pacífica con el objetivo de la reconciliación".
"Han pasado suficientes años para no hablar de vencedores y vencidos, de familias desgarradas, de fallecidos, de represaliados. Sin embargo, han pasado suficientes años para no olvidar lo que la conducta humana es capaz de provocar, fruto de la barbarie y la sinrazón de determinados personajes autoritarios", se indica en el documento.
Así, se precisa que la democracia es "suficientemente madura para que todos hablemos con todos, sanemos nuestras heridas y seamos capaces de una convivencia pacífica, consensuada y enriquecedora". En este sentido, se indica que aunque quedan personas vivas que fueron "despojadas de todos sus bienes, desarraigadas de su entorno más cercano, teniendo que huir con lo puesto para poder salvar sus vidas y que no quieren recordar, las administraciones públicas están obligadas a mantener viva la memoria al objeto de aprender de los errores pasados". "Es un día para recordar y para reconciliar", finaliza.