Si existe un lugar que aúne naturaleza, deporte y turismo en Andalucía, sin duda la
Gran Senda de Málaga se lleva el primer premio. Se trata de una
ruta pionera en la comunidad al incorporar la variedad territorial y ambiental de toda una provincia, integrándola en un único recorrido que estimula el interés por sus espacios naturales y promoviendo las visitas a los municipios malagueños.
Además, supone un punto de encuentro entre el medio ambiente, el deporte, el turismo y las oportunidades de empleo, fomentando
el desarrollo integrado de la provincia de Málaga desde la perspectiva del enfoque sostenible.
Así, esta ruta discurre por 660 kilómetros divididos en 35 etapas por 51 municipios. En este artículo presentamos unas selectas opciones, seis concretamente, en las que
el visitante podrá disfrutar de un entorno único.
1. Alameda-Fuente de Piedra. En la Comarca de Antequera se encuentra esta ruta.
Alameda y
Fuente de Piedra, principio y final de etapa, están en una línea recta nordeste suroeste pero separadas por las Sierras de la Camorra o de
Mollina. La Sierra de la Camorra es un obstáculo demasiado importante como para abordar su ascensión, de modo que la elección de rodearla por su parte meridional
es la mejor para conocer al menos algo de la vegetación que la debería cubrir. Los dos bosques de mayores dimensiones se pueden visitar durante la etapa, los situados en los flancos oeste y sur. Se observa un poco de encinar, pero es el pinar de pino carrasco el que domina la foresta. Hay además unas buenas panorámicas de la Vega de Antequera durante la bajada, cerca de una zona de cuevas.
El Área Recreativa del Nacimiento del Arroyo de Santillán es todo un oasis de verdor en el paisaje circundante. Tiene una extensa zona de uso público y permite conocer desde su origen uno de los principales aportes de
la Laguna de Fuente de Piedra, de la que se tienen algunas panorámicas espléndidas.
A pocos metros se sitúa el Castellum de Santillán en el Caperuzón, unas ruinas romanas de entre los siglos I a III d.C. de una villa residencial que posteriormente fue amurallada.
2. Villanueva de Tapia - Villanueva de Algaidas. Situada en la Comarca Nororiental, esta ruta une
Villanueva de Tapia y
Villanueva de Algaidas con una línea recta este-oeste que es interrumpida en su parte media realizando un amplio bucle hacia el sur que se soluciona luego tomando un largo trecho por el Arroyo del Bebedero. La Sierra del Pedroso destaca en las imágenes de satélite como una isla de límites muy definidos,
un alto promontorio de 1.023 metros de cota máxima. En un mar de olivos, el macizo cárstico ocupado por un denso matorral mediterráneo con encinas parece querer reconquistar los aledaños adelantando encinas de grandes proporciones y áreas de dehesas entre los cultivos.
El
Arroyo del Bebedero es otro tipo de isla, en este caso lineal, que mantiene una rica vegetación con sus limpias aguas. En el valle, en la zona de Rondán, hay una buena superficie arbolada, salvada por crecer en pendientes extremas, en las laderas de levante y poniente.
3. Entre las Comarcas del Valle del Guadalhoce y Guadalteba se encuentra la ruta
Álora (Estación de El Chorro ) - Carratraca - Ardales. En esta etapa se asciende a la parte superior de las Mesas de Villaverde, paraje pintoresco desde el que contemplar unas
impresionantes vistas del Tajo de los Gaitanes y del Valle del Guadalhorce, observar las aves rapaces que lo sobrevuelan, o visitar la iglesia mozárabe de Bobastro. Conforme se asciende se cortan sucesivamente
13 millones de años de arenisca sedimentaria y luego se anda sobre algunas rocas metamórficas muy interesantes, formadas por la cercanía del afloramiento de peridotitas de la Sierra de Aguas.
La variedad de paisajes resulta asombrosa durante todo el recorrido, al situarse el sendero en sucesivas atalayas dominantes sobre el Paraje Natural Desfiladero de los Gaitanes, El Chorro, el Valle del Guadalhorce, las sierras Blanquilla y del Agua, Ardales y el valle del Río Turón. El Cerro San Pedro se constituye en un
excelente mirador a una buena parte de la provincia malagueña.
En pocas rutas se tiene la oportunidad de conectar con
dos enclaves de tanta importancia histórica y arqueológica como las ruinas mozárabes de Bobastro, fundada por el inefable Umar Ibn Hafsun, y los baños termales de Carratraca, que Trinidad Grund promovió cerca de otros de sus proyectos turísticos pioneros, la Cueva de Ardales.
4. La ruta Río Bermuza. La Cueva de la Fájara se encuadra dentro de los itinerarios fluviales de la Gran Senda y discurre por la
Comarca de la Axarquía. Se trata de una Ruta lineal, recomendada para recorrer en primavera o verano, de dificultad media, 2,4 kilómetros de distancia y una hora aproximada de duración. La cueva de la Fájara constituye
uno de los hitos geológicos más importantes del Parque Natural
Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama. Se trata de una cavidad que actúa como surgencia en periodos de fuertes lluvias. Ha sido investigada por la GES de la SEM y
aún quedan algunas incógnitas por averiguar. Otra maravilla es el Monumento Natural Los Tajos del Alcázar en
Alcaucín. El Alcázar, dotado de todo lo necesario para pasar una agradable jornada, rodeados de bosques por donde merodea la juguetona ardilla (Sciurus vulgaris). El soniquete de algunas acequias trazada en los bancales,
recrea un ambiente sumamente agradable.
5. Monda - Ojén. Entre las Comarcas de la Sierra de las Nieves y de la Costa del Sol Occidental está esta ruta lineal que une las localidades de
Monda y
Ojén, con un desnivel medio de 520 metros (el recorrido transcurre entre una cota 340 metros y 860 metros). La dificultad es media, por la larga distancia a cubrir (16,8 kms.), por lo que el tiempo estimado son unas 6 horas a pie. Esta etapa
destaca por tener numerosos puntos interesantes a todos los niveles. Por ejemplo, en cuanto a gastronomía,
es obligatorio probar la sopa mondeña. La naturaleza ofrece al visitante una gran diversidad geológica, así como sus canteras y el pinar de repoblación. Las calles empedradas, los bancales y las albercas son un clásico. En los miradores de Sierra Canucha, Sierra Alpujata, del Corzo y de Ojén
se podrá disfrutar de unas vistas impresionantes.
6. Ronda - Jimera de Líbar. La etapa transita por un territorio de
gran valor etnológico y ambiental en plena Comarca de la Serranía de Ronda. En este camino espera
todo un mundo interior por descubrir repleto de historias y de leyendas, de fuentes, de alquerías abandonadas, de molinos y de cortijos. El camino atraviesa la mayor parte de los pequeños pueblos de la Serranía de Ronda. El punto de partida es la Plaza del Campillo, en el centro histórico de la ciudad de Ronda. El camino desciende hasta el fondo del Tajo y, desde allí, nos lleva a través del valle del Guadiaro, con el río y el ferrocarril como compañeros de viaje a lo largo de toda la etapa.
Pasamos muy cerca de la Cueva del Gato y atravesamos los pueblos de
Benaoján, Estación de Benaoján, Estación de Jimera y, finalmente
Jimera de Líbar, un soleado pueblo
donde reponer fuerzas y descansar del esfuerzo realizado.