"Estamos a punto de aplastarla, lo cual es una buena noticia", indicó el ministro
Francia está "a punto de aplastar" la ola de variante delta, la más peligrosa para la salud, y en los próximos días alcanzará el máximo de contagios de la de ómicron, indicó este martes el ministro de Sanidad, Olivier Véran.
En declaraciones a la televisión LCI, Véran indicó que el Ejecutivo estudia "dos curvas", en particular la de la variante delta, "que es la que manda gente a las ucis" y que justifica las restricciones impuestas en las últimas semanas.
"Estamos a punto de aplastarla, lo cual es una buena noticia", indicó el ministro, que señaló que el impacto de esa variante, muy dañina para la salud de los infectados, motivó que su Gobierno fomentara el teletrabajo y limitara los aforos en reuniones tanto en interiores como en exteriores.
Junto a ella, Véran señaló que se sigue la evolución de ómicron, con consecuencias más leves en los afectados, cuyo máximo de contagios ya se ha alcanzado en algunas regiones pero o a nivel nacional, algo que se espera "en los próximos días".
El responsable de Sanidad señaló que, a la hora de tomar medidas restrictivas o relajarlas, están más pendientes de la incidencia en los hospitales que en el número de infectados, que en las últimas semanas rondan los 400.000 diarios.
Véran también se refirió a la subvariante BA2, detectada en Dinamarca, de la que dijo que hay unos 60 casos localizados en Francia y que, según los primeros elementos, es susceptible de contaminar a pacientes que ya han superado la ómicron.
"Es tan contagiosa como ómicron pero no más peligrosa", agregó.
En este sentido, el presidente del Comité Científico que asesora al Gobierno, Jean-François Delfraissy, indicó en la radio France Info que la variante BA2, "parece que está tomando el poder" sobre su "prima mayor" ómicron.
Aseguró que en India "ya es mayoritaria" y consideró que es "más contagiosa" aunque están analizando su peligrosidad.
Delfraissy indicó que la presión hospitalaria se mantendrá a un nivel elevado hasta mediados de marzo, cuando se espera que se reduzca de forma progresiva al mismo tiempo que los contagios.