Se encuentra de visita en la ciudad por el 25 aniversario del regreso de Hong Kong a soberanía china
El nuevo jefe del Ejecutivo hongkonés, John Lee, juró hoy su cargo en presencia del presidente chino, Xi Jinping, quien se encuentra de visita en la ciudad por el 25 aniversario del regreso de Hong Kong a soberanía china.
Tras tomar posesión junto a su gabinete en el Centro de Convenciones hongkonés, Lee, quien fue secretario de Seguridad de la ciudad durante las protestas de 2019 y, el pasado mayo, elegido para su nuevo cargo por un comité de afines a Pekín, aseguró que su objetivo es que Hong Kong se convierta en una ciudad "llena de vitalidad y oportunidades".
"Gracias al apoyo del Gobierno central y a la resiliencia de los hongkoneses, la ciudad ha logrado superar desafíos uno tras otro manteniendo la política de 'un país, dos sistemas', que es la mejor garantía para la estabilidad y la prosperidad de Hong Kong", dijo Lee, recoge la prensa local.
El principio de "Un país, dos sistemas" permite a Hong Kong mantener oficialmente libertades inexistentes en la China continental durante 50 años -es decir, hasta 2047-, aunque en los últimos años esas libertades se han visto mermadas y se han sucedido procesos judiciales contra quienes organizaron las multitudinarias protestas prodemocráticas de 2019, contra figuras opositoras o contra medios de comunicación críticos con Pekín.
Aunque las protestas se diluyeron con el inicio de la pandemia de la covid, China las desactivó definitivamente a mediados de 2020 al imponer una polémica ley de seguridad que acabó con los activistas más destacados del movimiento prodemocrático exiliados o en prisión.
Durante su discurso hoy, Lee aseguró que la citada legislación ha llevado a la ciudad "del caos a la prosperidad" y que "los próximos cinco años serán vitales para que Hong Kong prospere en todos los aspectos".
Xi intervino tras Lee para asegurar que el modelo de "Un país, dos sistemas" es apoyado tanto por los residentes de la parte continental de China como por Hong Kong y que "no hay necesidad de cambiar un sistema que funciona".
El mandatario comunista conminó al Gobierno hongkonés a ser más eficaz y a integrarse mejor con las estrategias de desarrollo chinas.
"Esta ciudad no se puede permitir un descenso al caos. La gente tiene la expectativa de que sus vidas van a mejorar, que va a haber más oportunidades de trabajo y mejor educación para sus hijos. El nuevo Gobierno no puede decepcionar a los hongkoneses; tenemos que ser pragmáticos", aseguró.
"Los hongkoneses tienen futuro, Hong Kong tiene futuro", zanjó el líder chino.
Con todo, Lee heredará algunos problemas de su predecesora, Carrie Lam, una de las líderes menos populares en la historia del territorio durante su mandato, que comenzó en 2017.
La economía de la excolonia ha afrontado en los últimos años, además de la agitación política interna, vaivenes geopolíticos ante las disputas entre China y Occidente y la pandemia de la covid.
Algunos críticos ponen en duda que Lee, dada su poca experiencia en política económica, sea capaz de reflotar la economía de la ciudad, que se contrajo un 2,9 % en el primer trimestre del año, cuando la urbe sufrió su peor rebrote de coronavirus, enfermedad que había logrado mantener a raya hasta la fecha.
Aquel rebrote dio al traste con la estrategia de cero covid de Hong Kong, que había mantenido estrictos controles en las fronteras que incluían largas cuarentenas para los que conseguían acceder, socavando así su posición como centro financiero internacional.