Denuncian bloqueos de bolsonaristas en infraestructura petrolera de Brasil

El Partido de los Trabajadores (PT), que lidera el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, denunció este domingo que bolsonaristas radicales están bloqueando la distribución de combustibles en el estado de Paraná, en el sur del país.

La presidenta de la formación progresista, Gleisi Hoffmann, divulgó un vídeo en el que simpatizantes del exmandatario Jair Bolsonaro "están intentando impedir" la distribución de hidrocarburos en la unidad situada en el municipio de Araucária.

El suceso ocurre horas después de que miles de radicales partidarios del exjefe de Estado invadieran y causaran graves destrozos en las sedes del Parlamento, la Presidencia y la Corte Suprema, con el objetivo de derrocar a Lula y devolver al poder al líder ultraderechista.

Hoffmann, quien es diputada federal por Paraná, pidió al gobierno regional movilizar a la Policía Militar para dispersar a los manifestantes, que, como ocurrió en Brasilia, quieren sacar por la fuerza a Lula de la Presidencia, que asumió el pasado 1 de enero.

La Federación Única de los Petroleros (FUP), un poderoso sindicato del sector, había alertado poco antes de "posibles actos terroristas en las refinerías" de la petrolera estatal Petrobras "en todo el país".

"Estos posibles actos pueden colocar en riesgo los activos de Petrobras, la integridad física de los trabajadores de estas unidades, así como el entorno de estos activos, y comprometer el suministro de combustibles para la población", advirtió el gremio.

Asimismo, señaló que esos "ataques" habían sido "anunciados por los terroristas bolsonaristas en sus redes sociales" previamente y que uno de los primeros objetivos sería la refinería de Duque de Caxias, en Río de Janeiro, donde por el momento no hay relatos de bloqueos.

Los radicales bolsonaristas no reconocen el resultado de las elecciones del pasado 30 de octubre, que Lula venció ante Bolsonaro por una ajustada diferencia de 1,8 puntos porcentuales.

Desde la celebración de los comicios, grupos de extrema derecha bloquearon diversas carreteras del país y organizaron actos vandálicos en Brasilia, incluyendo la colocación de un dispositivo explosivo cerca del aeropuerto en vísperas de la toma de posesión de Lula.

Este domingo, los radicales entraron de forma violenta en la sede del Congreso Nacional, la Presidencia y la Corte Suprema, donde causaron graves daños, destrozando mobiliario y obras de arte, además de robar armas de fuego, munición y documentos.

Hasta el momento, hay 300 detenidos por este episodio que recordó a la invasión del Capitolio de Estados Unidos ocurrida el 6 de enero de 2021 por parte de simpatizantes del expresidente Donald Trump, quien guarda una relación de amistad con Bolsonaro.