La operación se inició con dos investigaciones por corrupción de menores y posesión y distribución de pornografía infantil, y culminó con las detenciones y registros domiciliarios que se han llevado a cabo en Valencia (3), Barcelona (1), Toledo (1), Orense (1) y Madrid (2).
En la operación se ha intervenido abundante material pornográfico almacenado en diferentes soportes (discos duros, pen drives, CD, DVD y ordenadores portátiles).
En los dos casos fue fundamental la colaboración ciudadana ya que ha sido gracias a dos denuncias interpuestas como se tuvo conocimiento de los archivos a investigar, según la Delegación del Gobierno.
De las detenciones practicadas, la más destacada es la efectuada en Barcelona, ya que fue intervenida tal cantidad de material pornográfico que el Juzgado de Instrucción de Barcelona que recibió al detenido acordó el ingreso en prisión preventiva aunque esta persona carecía de antecedentes policiales.
Los archivos investigados estaban comprimidos y en su interior había numerosas fotografías de pornografía infantil, así como archivos de vídeo con el mismo contenido.
En esas fotografías se observan imágenes “muy duras” de agresiones sexuales realizadas a menores, incluso de muy corta edad.
Los investigadores también han efectuado gestiones sobre la difusión de las imágenes, comprobando que los mismos están distribuyéndose a través de redes de intercambio de archivos denominadas Peer To Peer (P2P), entre pedófilos de todo el mundo.