El ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, partió hoy rumbo a Nueva York donde participará en una conferencia y mantendrá una serie de encuentros con su par de EE.UU, John Kerry, y otros representantes del Grupo 5+1 con quien negocia un acuerdo sobre el polémico plan nuclear de su país.
El ministro, que el domingo participará en la conferencia de revisión del Tratado de No Proliferación nuclear en la sede de las Naciones Unidas, viajó acompañado de todo su equipo negociador con la idea de continuar el diálogo para alcanzar un acuerdo definitivo antes del próximo 30 de junio que permita garantizar el desarrollo exclusivamente pacífico del programa nuclear iraní a cambio del fin de las sanciones que lastran su economía.
Zarif será uno de los oradores principales en dicha conferencia, en la que intervendrá dos veces, una como representante de Irán y otra como del movimiento de los países No Alineados.
De forma paralela, él y sus colaboradores mantendrán encuentros con Kerry, con la alta representante europea de Política Exterior Federica Mogherini y con otros miembros del Grupo 5+1.
El pasado viernes culminó en Viena la primera ronda de negociaciones entre ambos grupos después de que el día 2 de abril se anunciara un principio de acuerdo entre las partes que establecía las líneas generales para llegar a un pacto definitivo.
En esta reunión se comenzó a redactar el texto de dicho acuerdo, una tarea que fue definida como "complicada y amplia" por el viceministro iraní de Asuntos Exteriores y uno de los altos negociadores de su país, Sayed Abás Araqchí.
Araqchí subrayó que de momento las partes se están centrando en el complicado asunto de la eliminación de las sanciones económicas que pesan sobre su país, cuyo amplio espectro e interconexión hacen difícil el trabajo.
En cualquier caso, apuntó que las partes han "negociado de manera intensiva" sobre este asunto debido al interés de su país en que quede "una clara imagen de la eliminación de las sanciones" tras el cruce de declaraciones entre su país y los EE.UU sobre este tema.
"Se deben eliminar todas las sanciones económicas y financieras", que es en lo que se basa el acuerdo, dijo el viceministro iraní y subrayó que "intentaremos redactarlo".
En ese sentido, Araqchí también reconoció que hubo "avances y discusiones útiles" con EE.UU. y los países de la Unión Europea durante el encuentro de Viena.
El entendimiento anunciado en Lausana (Suiza) del que no existe un versión oficial acordada por las partes, estipula controles y limitaciones de diferente duración -entre 10 y 25 años- para distintos aspectos del programa nuclear de Irán.
Al mismo tiempo, prevé el levantamiento de las sanciones, si bien el problema estriba en que Irán exige que este fin sea automático e integral una vez que se apruebe el acuerdo mientras que la otra parte señala que deberá hacerse de forma gradual en función del cumplimiento que Teherán haga del pacto.