"Agradezco la confianza y el desprendimiento", dijo Guaidó antes de la votación del acuerdo
La oposición de Venezuela, que controla el Parlamento, acordó este martes que el diputado Juan Guaidó, a quien más de 50 países reconocen como presidente encargado, se mantenga al frente del Legislativo hasta que "cese la usurpación" que considera hace el gobernante Nicolás Maduro de la Presidencia.
Mediante un documento votado de forma unánime en sesión ordinaria, la primera después del receso del Parlamento, las fracciones opositoras decidieron que Guaidó continúe en el cargo, que se debe renovar en enero próximo y que, luego de un acuerdo de 2015, correspondía a otro diputado.
"Agradezco la confianza y el desprendimiento", dijo Guaidó antes de la votación del acuerdo. "Esto nos va a encontrar en la calle", añadió sin aclarar si hará llamamientos a nuevas manifestaciones antigubernamentales.
Guaidó, un ingeniero de 36 años y militante de la formación Voluntad Popular, del dirigente opositor Leopoldo López, proclamó hace casi 8 meses un Gobierno interino que reconocen más de 50 países, con Estados Unidos a la cabeza.
Entonces, Guaidó tomó esta iniciativa en su condición de jefe del Parlamento y en interpretación de varios artículos de la Constitución de Venezuela que, entre otras normas, establece que el poder Ejecutivo recae en el líder del Parlamento en caso de una "falta absoluta" del presidente.
Se considera como "falta absoluta" la muerte, la renuncia, la destitución, el abandono de cargo o la revocatoria del mandato.
Con la decisión que el Parlamento tomó hoy, la oposición evita la eventual proclamación de otra administración interina y mantiene a Guaidó como su principal líder.
El antichavismo, así como buena parte de la comunidad internacional, asegura que Maduro usurpa la Presidencia tras haber sido elegido en unos comicios en los que se prohibió participar a los principales líderes opositores.
El propio Guaidó había adelantado hace días que su gestión se mantendría hasta que Maduro abandone el poder y se renueve el órgano electoral, que la oposición asegura está subordinado al chavismo, y sean convocadas nuevas elecciones presidenciales.
Venezuela atraviesa un pico tensión política desde que la oposición no reconociera la reelección de Nicolás Maduro y Guaidó proclamara su Gobierno interino.
Las partes han intentado resolver la crisis a través de varios mecanismos de negociaciones, el último con la mediación del Reino de Noruega, pero todos han acabado sin acuerdos.
Ayer, Maduro lanzó un nuevo mecanismo de diálogo nacional con un sector minoritario de la oposición, pero las fuerzas aglutinadas en torno a Guaidó rechazaron este martes esta nueva opción y reiteraron sus condenas al Gobierno.