La Tarasca, el particular maniquí de mujer subido a un dragón que encarna el triunfo del bien sobre el mal, ha anunciado este mediodía por las calles de Granada los días grandes de la Feria del Corpus, ataviada con un vestido verde agua, inspirado en los años 50 y rodeado con una especie de capote torero.
El que se considera uno de los secretos mejor guardados cada año en la ciudad ha vuelto a despertar el interés, la admiración e incluso las críticas de vecinos y visitantes, que han abarrotado las calles del centro para disfrutar de un desfile en el que no han faltados comparsas de música, gigantes y cabezudos.
María Isabel Penela, encargada en esta ocasión de vestir al esbelto maniquí, ha explicado a los periodistas que, con su propuesta, ha pretendido mostrar la moda andaluza, con un traje de fiesta especialmente "diseñado y pensado" para la Tarasca.
La responsable de la tienda Cheny, cuya primera colección presentó en Madrid Fashión Week en 2006, ha detallado que el diseño lleva plasmadas todas las tendencias de la temporada, con colores verde agua, estampado de flores y abanicos muy típicos de la feria.
Sobre una base de seda bordada e inspirado en los años 50, en el traje también está presente la fiesta de los toros y consta de una especie de capote de circunda la parte inferior.
Respecto al peinado, su encargado, José Montesinos, ha señalado que ha pretendido plasmar algo acorde al vestido, "racial, torero y muy granadino", tomando un color chocolate "muy novedoso".
Preguntada sobre las ácidas críticas que suele despertar la forma de vestir, peinar y pintar a la Tarasca, la diseñadora ha dicho que las recibirá "con todo el cariño" y de manera constructiva.
"Cada uno tiene un gusto distinto, nuestra impresión ha sido el resultado de mucho esfuerzo, trabajo y pensar mucho en ello", ha declarado Penela, que se ha mostrado "preparada" para hacer frente a la genuina "malafollá" granadina.
Por su parte, el alcalde en funciones de Granada, Juan Antonio Mérida (PP), ha agradecido al trabajo hecho, que ha calificado como un "éxito", y ha destacado que la Tarasca sea un "elemento de referencia" en la ciudad y fuera de ella.
La Tarasca, imagen mitológica tomada de primitivas religiones que simboliza el triunfo de la belleza sobre lo monstruoso, representa el contrapunto pagano a la fiesta religiosa que mañana también llevará a la calle a miles de ciudadanos con la celebración del Corpus Christi.
Su procesión, en la que va acompañada de cabezudos y charangas, es una tradición originaria de la ciudad francesa de Tarascón, aunque su evolución se pierde en las representaciones teatrales medievales y en los cortejos públicos que servían de adoctrinamiento religioso al pueblo, predispuesto siempre a la fábula y el asombro.
La fiesta mayor de Granada celebrará mañana su día grande, con la salida en procesión de la Custodia del Corpus Christi, formada por autoridades civiles y militares, cofradías y mujeres vestidas de mantilla.