Todos los indicios apuntan que el cráneo y los huesos hallados este pasado martes en un contenedor en las inmediaciones del Instituto Hermenegildo Lanz de Granada son antiguos y pueden pertenecer a algún estudiante de Medicina que los usara para su estudio y se haya desprendido de ellos.
De hecho, en los huesos han sido hallados restos de alambre que permiten pensar que los huesos han estado colgados o expuestos de alguna manera. En ellos se han escrito además con rotulador indeleble diversas numeraciones como las que ponen los estudiantes de Medicina, según han detallado a Europa Press fuentes del Cuerpo Nacional de Policía.
El hallazgo de los huesos se produjo el martes por la mañana, después de que una persona los encontrara y alertara a la Policía.
La Policía Científica y un experto forense han estado estudiándolos para determinar si podían ser o no de animales y si, junto al cráneo, podrían pertenecer a algún estudiante de la Facultad de Medicina que lo haya usado para su estudio, tal y como apuntan las pruebas recabadas hasta el momento.