Piden más control de los vertidos industriales a la red de saneamiento

El Ayuntamiento de Puente Genil ha vuelto a poner en conocimiento de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) los reiterados episodios de contaminación que viene padeciendo el río Genil por estas fechas coincidiendo con la campaña de la aceituna, una circunstancia que unida a un periodo de escaso caudal al finalizar los desembalses para riego, “implica que el efecto de contaminación sea aún más grave”. Según ha informado el Consistorio a través de una nota de prensa, el último vertido industrial del que se ha tenido conocimiento, ha tenido su origen en el río Yeguas y se produjo la pasada semana, “siendo fácilmente observable desde el casco urbano por el color ocre del agua y el olor desprendido, teniendo su origen en el sector industrial oleícola”. El vertido fue visible desde hora temprana y duró todo el día, “lo que indica que el volumen vertido fue importante, hecho que fue confirmado por la propia Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, que localizó su origen en una empresa de un municipio sevillano cercano”. Al hilo de este tipo de episodios que puntualmente se reproducen y paralelamente a los mismos, el alcalde, Esteban Morales, ha mantenido una reunión con el presidente de la Asociación de Empresarios de Puente Genil (Asojem) Alfonso Ariza, en la que se ha puesto de manifiesto el trabajo que viene desarrollando la empresa pública Egemasa en materia de control de vertidos industriales a la red de saneamiento y los resultados de calidad del agua del último año. Durante el encuentro, que tuvo como escenario la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), y en el que también estuvieron presentes la concejala de Medio Ambiente, Loli Franco, el gerente de Egemasa, Francisco Cabezas y el responsable del Área de Gestión de Aguas, Francisco Montero, todas las partes coincidieron en mantener una línea de colaboración en la que se canalice la necesidad de cumplimiento de los valores máximos de contaminación admisibles que recibe la EDAR desde el tejido industrial de la localidad. En este sentido, el alcalde dijo que la industria tiene que hacer un esfuerzo para reducir la contaminación de sus vertidos, de forma que se mejore la eficiencia de la EDAR, reduciéndose el consumo energético de esta instalación y la emisión de olores desde la red de saneamiento. Por su parte, Ariza fue sensible ante la necesidad de mejorar la situación medioambiental del municipio, y trasladó al alcalde su colaboración para difundir entre sus asociados la información recibida, a la vez que daba por hecho que invertir en calidad medioambiental constituye a día de hoy un excelente incentivo para la industria.