Las obras de reacondicionamiento del entorno del Ayuntamiento han propiciado que salga a la luz el aljibe que abastecía a las instalaciones y que está ubicada entre la trasera y la fachada principal del Mercado de Abastos, en la calle Calderón de la Barca.
La edificación se data en el siglo XVIII a falta de estudios exhaustivos y ya se conocía su existencia toda vez que el siglo pasado se hizo la oquedad que ahora se puede ver bloqueada por una tapa de alcantarillado puesta para evitar riesgos.
La construcción es rectangular de 4,40 por 3,30 metros, de piedra ostionera y mortero de cal rematada por una cúpula de la que se puede ver unos tres metros y medio. La atarjea es la que comunica el aljibe con el edificio al que prestaba servicio.