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Sanlúcar

Fomento se ofrece al Ayuntamiento para mediar con los bancos

La Junta de Andalucía da respuesta a las peticiones de ayuda por parte del alcalde de la ciudad, Víctor Mora, para abordar la problemática de la ocupación de viviendas ante la escasez de pisos sociales

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  • Corrala \'El Castillo\'. -

La respuesta de la Consejería de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía a la situación de las corralas de Sanlúcar no ha tarddo en producirse, después de que el pasado viernes el alcalde de la ciudad, Víctor Mora (PSOE) cuestionara la validez de la administración competente en materia de Vivienda.

La Junta de Andalucía ha garantizado al Ayuntamiento de Sanlúcar tu "total apoyo y colaboración, como siempre los ha tenido, para la intermediación con las entidades financieras". Así reza en el comunicado oficial remitido a los medios desde la delegación que dirige Manuel Cárdenas, delegado territorial que la semana pasada se sumó a la petición de su partido, izquierda Unida, para que el Consistorio dotara de suministros de luz y agua a las viviendas ocupadas.  Hoy Cárdenas ha explicado que "nuestra prioridad, en Sanlúcar de Barrameda y en toda Andalucía, es defender el derecho de todos los ciuddanos a un techo digno bajo el que vivir, y la Consejería de Fomento y Vivienda viene trabajando en esa línea desde hace ya más de dos años". Así se ha referido Cárdenas al Programa Andaluz de Defensa de la Vivienda, al que el Ayuntamiento de Sanlúcar está adherido como "una eficaz herramienta de negociación con las entidades financieras". El delegado territorial de Fomento y Vivienda, Manuel Cárdenas, ha destacado que la consejera de Fomento y Vivienda, Elena Cortés (IU), ha trasladado al alcalde de Sanlúcar "todo el apoyo en las negociaciones con las entidades financieras para evitar que existan viviendas vacías en sus manos mientras que haya familias necesitadas de acceder a una vivienda digna y adecuada". Palabras que habrían llegado hoy mismo al regidor sanluqueño en una carta remitida por la titular de Vivienda como respuesta a las peticiones que el Ayuntamiento de Sanlúcar le trasladó hace dos semanas, tras aprobar en pleno la cesión de suelo a la Junta para la construcción de viviendas sociales y la realización de un censo de viviendas en propiedad de los bancos con el objetivo de negociar un alquiler social y ponerlas a disposición de aquellas familias que se encuentren en una situación de exclusión social contrastada. En este sentido, Cortés ha ofrecido al alcalde "la total disposición de esta Consejería, a través de la Delegación territorial, como órgano competente en la provincia, para mantener una reunión de trabajo en la que abordar la problemática de vivienda en este municipio. 

Baja el tono en un conflicto que ha saltado en las últimas horas al panorama regional, con las críticas del Partido Popular a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, a la que acusan de haber instaurado, con el caso de la Corrala Utopía, "la ley de la selva en vivienda".

El Ayuntamiento de Sanlúcar, a través de los servicios sociales, ha realizado un informe sobre las familias que han ocupado los seis inmuebles que forman parte de las llamadas 'Corralas por la Dignidad' en Sanlúcar. Si bien la plataforma de las corralas habla de la existencia de 86 familias, el Consistorio sólo tiene constancia de la ocupación llevada a cabo por 46. De entre estas, 16 son usuarias de los servicios sociales municipales, otros 7 están inscritos en el Registro municipal de Demandantes de Viviendas, y también se han detectado casos en los que los okupas son propietarios de viviendas propiedad de la Junta de Andalucía o las han vendido recientemente.

También tiene ultimado el Consistorio sanluqueño el censo de viviendas vacías en propiedad de los bancos, que fueron abandonadas cuando estalló la burbuja inmobiliaria. Algunas, objeto de saqueos, apenas están habitables, si bien no ha trascendido el número total de inmuebles que se podrían negociar con las entidades bancarias por temor a un efecto llamada.

Mientras tanto, la Plataforma de Corralas por la Dignididad se mantiene en los seis inmuebles ocupados recibiendo ayudas de organizaciones - como la CNT de Jerez, que este pasado fin de semana les ha entregado alimentos, ropa y enseres - y planteándose la posibilidad de llevar a cabo movilizaciones para evidenciar su situación. Cuentan también con el apoyo del Círculo Podemos en Sanlúcar, Izquierda Unida y el SAT.

Arrastrados a la ocupación "por la desesperación". Es el caso de Laura, una mujer de 37 años, madre de dos hijos de 10 y 8 años, y que desde que se separó de su marido, hace seis años, está sin trabajo ni ingresos, saltando de un alquiler a otro, y haciendo malabares para salir adelante con la pensión para alimentos que sus hijos reciben de su padre y que, tras agotar todas las ayudas, se ha convertido en el único ingreso de la familia.

Una situación crítica que hace un mes le llevó a abrir la puerta de uno de los apartamentos de una promoción nueva de viviendas, vacía y sin estrenar desde hace ocho años, y que ella solía mirar pensando: "qué pena que estén vacías, con lo bonitas que se ven".

"Un hombre me dijo un día que una chica había entrado en una de ellas y yo pensé: no miro atrás. Estaba desesperada porque si no le daba un techo a mis hijos mi exmarido se quedaría con la custodia. En la desesperación no miras nada", dice.

Así entró en un apartamento de dos habitaciones, un salón, una cocina y un baño, sin luz ni agua, y en el que se ha instalado con la ayuda de muchos vecinos que le han dado colchones, sábanas, cortinas y hasta una cocinita de cámping.

Allí se ha unido a familias con otras situaciones críticas como la suya y que han tomado la misma decisión. Como Regla, una mujer de 42 años, con dos mellizos de 9 años.

Hace siete meses su pareja ingresó en prisión para cumplir una condena de 14 meses, y desde entonces ella no pagaba el alquiler y su hijo mayor era quien abonaba los recibos del agua y la luz.

"Fui a los servicios sociales pero me decían que había gente con más preferencia que yo, en peor situación todavía. Me dijeron que buscara un alquiler de 200 euros. ¿Y donde iba a encontrar eso?. Pasé por aquí y le pregunté a un hombre si estos pisos se alquilaban y me dijo que estaban vacíos y que la gente se estaba metiendo. Me volví loca, no podía seguir más como estaba, por mis hijos lo volvería a hacer", cuenta esta mujer que de vez en cuando gana algunos euros haciendo rifas.

Regla no tiene miedo: "tengo miedo a estar como estaba. He pensado en hacerlo antes pero me iba para atrás y seguía viviendo con un sufrimiento que me estaba pinchando todo el día".

 

 

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