El sanluqueño Eduardo Rangel, miembró de la Asociación Deportiva Guadalquivir, participó en el Ironman de Lanzarote, una de las doce pruebas deportivas emblemáticas que se disputan, con el apoyo de sus organizadores, para llevar el mensaje de la donación de órganos a todos los participantes.
El desafío comenzó el mes de enero con la Media Maratón Internacional Vila de Santa Pola, con 10.000 inscritos, seguido de la Maratón de Sevilla en febrero, Transgrancanaria en marzo y travesía Oceanman 10 kilómetros en el mes de abril. Su nueva aventura en este mes de mayo fue el Ironman de Lanzarote 2015.
El Ironman de Lanzarote, tiene tuvo participación de aproximada de 2.000 personas y es calificado como uno de los mas duros del mundo. Es un triatlón de larga distancia y consta de tres pruebas, en concreto 3,8 kilómetros de natación, 180 de bicicleta y una maratón de 42,2, donde se desafía la propia resistencia del cuerpo humano.
Su registro fue13.43. La prueba se desarrollo en un día bastante duro, por el viento tradicionalmente reinante en la isla, aunque en este día concreto en algunas zonas superaban los 50 kilómetros por hora. Como incidente a destacar, Eduardo estuvo a punto de tener que retirarse debido a una rotura de la cadena y posterior caída, aunque los servicios mecánicos de la misma prueba, pudieron solucionar el problema tras media hora de espera. Eduardo iba para otro asunto mucho mas importante como es llevar el mensaje de la donación de órganos entre los participantes, donde la propia organización del Ironman estuvo constantemente, a través de las redes sociales y en la misma prueba in situ, ejerciendo acciones para promover su causa. Ese dorsal que la organización le cedió, numero 1.000, como muestra de esos 1.000 nuevos donantes conseguidos.
El sanluqueño Eduardo Rangel, al frente de la Fundación Donando Vidas, inició el Desafío Renacer 2015, una campaña anual sin precedentes para promover la donación de órganos entre 100.000 deportistas de todo el país. España registra una media de expedición de 5.000 tarjetas de donantes anuales.
“Con este desafío queremos convencer a todos los deportistas para que se conviertan en verdaderos héroes a través de la donación", subrayó Rangel. “Vamos a intentar conseguir algo histórico, marcar un antes y un después en la historia de la sensibilización sobre la donación de órganos con el apoyo del mundo del deporte, que siempre ha destacado por su vocación solidaria”, se propone Eduardo Rangel.