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Sevilla

Las inversiones de Boliden debieron hacerse antes del vertido, según Ecologistas

Isidoro Albarreal, portavoz de Ecologistas en Acción, recuerda que el 1995 ya hubo denuncias de los ingenieros de filtraciones en la balsa

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  • Isidoro Albareal atiende a los medios de comunicación. -

Ecologistas avisa que las inversiones esgrimidas por Boliden debían haber sido hechas "mucho antes" del vertido

Isidoro Albareal atiende a los medios de comunicación - Francisco J. Olmo - Europa Press

SEVILLA, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

Ecologistas en Acción ha avisado este martes de que las inversiones esgrimidas por la multinacional sueca Boliden ante la demanda con la que la Junta de Andalucía le reclama 89,8 millones de euros, por los costes de restauración ambiental derivados de la catástrofe natural de 1998 por la fractura de la balsa de residuos de metales pesados de la mina de Aznalcóllar, explotada entonces por Boliden-Andaluza de Piritas S.A. (Apirsa); deberían haber sido acometidas por la empresa "mucho antes" del siniestro, precisamente para evitar una situación de tal índole.

Así lo ha manifestado Isidoro Albarreal, portavoz de Ecologistas en Acción, tras la nueva sesión celebrada por el Juzgado de Primera Instancia número once de Sevilla, para resolver la mencionada demanda de la Junta, dirigida contra Boliden-Apirsa y las sociedades del mismo grupo Boliden AB y Boliden BV.

En esta nueva sesión ha cobrado importancia la comparecencia de Robert Gibb, quien como miembro de la consultora económica Ernst & Young se encargó de auditar las cuentas de Boliden-Apirsa entre 1994 y 2002, autor de dos informes emitidos en 2003 y 2005 sobre las "cantidades gastadas" por la entidad como consecuencia del "accidente" de la fractura de la balsa de residuos de metales pesados de dicho recinto minero.

Como consecuencia del siniestro, unos cinco millones de metros cúbicos de lodos contaminantes fueron vertidos en el entorno de la cuenca del río Guadiamar, con efectos sobre más de 4.600 hectáreas que abarcaban incluso zonas en las proximidades del parque natural de Doñana, espacio protegido como Patrimonio Mundial.

LOS COSTES DE BOLIDEN

En este marco, este auditor de cuentas ha constatado que las facturas e informes incluidos en la contabilidad de Boliden-Apirsa reflejan que la entidad afrontó costes por unos "115 millones de euros", por los gastos derivados del siniestro y las pérdidas posteriores, figurando entre estas cuantías 45,8 millones de euros en investigaciones y obras relacionadas con el asunto, en especial 30 millones de euros para el sellado de la balsa; y unos 31,4 millones de euros destinados a las labores de retirada de lodos contaminantes.

Al respecto, Isidoro Albarreal ha alertado de que "muchos de los gastos" que ahora esgrime la representación de Boliden-Apirsa para intentar eludir la demanda de la Junta, como por ejemplo "el sellado de las filtraciones" detectadas en la balsa de residuos de metales pesados de la mina, deberían haber sido acometidas no después del siniestro, sino "mucho antes" de que colapasase la balsa, precisamente para evitar la fractura.

DESDE ANTES DEL VERTIDO

En ese sentido, ha explicado que fue en 1995 cuando Boliden decidió "iniciar las obras de la nueva corta" minera de Los Frailes, en Aznalcóllar, y entonces "ya hubo denuncias de los propios ingenieros de la empresa, que dijeron que había que reforzar la balsa (de residuos de metales pesados) o construir otra nueva".

Especialmente, ha rememorado la figura de Manuel Aguilar Campos, ingeniero de minas de Boliden-Apirsa en Aznalcóllar, ya fallecido, quien una vez jubilado alertó sin éxito sobre las deficiencias de la balsa, cuyo colapso se desencadenó unos dos años después de sus denuncias públicas.

"NO SE HICIERON LAS INVERSIONES NECESARIAS"

"No se hicieron las inversiones necesarias para reforzar la balsa", ha señalado así Isidoro Albarreal, agregando además respecto a los gastos propios alegados por la representación de Boliden-Apirsa, que los costes de reparación de la balsa de residuos de metales pesados no pueden ser entendidos como inversiones en "restauración" medio ambiental, pues se trataba de trabajos "imprescindiblemente" destinados a que el vertido "no continuase".

De este modo, el portavoz del colectivo ecologista ha considerado que ha quedado "demostrado" en la sesión, que la gran mayoría de las inversiones de Boliden-Apìrsa se redujeron a trabajos circunscritos a "parar el vertido".

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