La Federación sevillana de Ecologistas en Acción, finalmente, ha formulado alegaciones en contra de la aprobación inicial del 'Modificado del Plan Especial de Actuación Minera Las Cruces', correspondiente al complejo que, en suelos de Gerena, Guillena y Salteras, explota la compañía 'Cobre las Cruces'. Esta modificación del plan especial relativo al complejo minero tiene por objeto la ampliación de la zona de canteras gracias a la incorporación de seis fincas de Salteras, aunque los ecologistas avisan de que la iniciativa rescata la idea de restaurar la corta minera creando un "profundo lago", una opción vetada años atrás.
Antonio Ramos, responsable Minas y Canteras de la federación provincial de Ecologistas en Acción, ha informado a Europa Press de que la organización ya ha formalizado las correspondientes alegaciones contra el documento de aprobación inicial de esta modificación del plan especial del complejo minero de la multinacional canadiense 'Inmet Mining'. "Pedimos que sea rechazada por completo", ha manifestado en cuanto a la mencionada modificación del plan especial del complejo minero.
Y es que, según Ecologistas en Acción, a través de esta modificación del plan especial, 'Cobre las Cruces' "rescata" su idea inicial de "convertir la corta minera en un profundo lago" a la hora de poner en marcha el plan de restauración del entorno afectado por la corta minera. Esta opción, según la organización ecologista, fue vetada tanto por el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex), como por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
El aviso del Cedex
En efecto, Ecologistas en Acción esgrime un informe del Cedex recogido por Europa Press y que señala, textualmente, que "la creación de este lago plantea serias dudas, no sólo en cuanto a los problemas de calidad, funcionalidad ecológica y aprovechamiento de los recursos hídricos, sino también en cuanto a la estabilidad de los taludes que conforman el vaso", toda vez que "en el escenario más desfavorable, la caída masiva de los taludes podría ocasionar muy graves daños ambientales en ámbitos situados fuera de la zona de actuación (Sevilla, riberas y cauce del Guadalquivir y, por supuesto, Doñana)".
"Rescatando ahora la opción del lago, 'Cobre las Cruces' pretende ahorrarse los costes de restauración aprobados en 2005 mediante los planes de restauración de la propia mina y de la empresa pública de gestión medioambiental 'Egmasa'", alega Ecologistas en Acción. Y es que los planes de restauración vigentes hasta el momento contemplan "rellenar el hueco minero con 40 millones de toneladas del propio material inerte (margas azules del Gudalquivir) que ahora se sacan de la corta y se depositan en las escombreras" para "garantizar el sellado del acuífero Niebla-Posadas evitando su contaminación y su pérdida de agua".
Peso económico y vertiente medioambiental
Este complejo minero a cielo abierto, como es sabido, constituye todo un revulsivo económico para la comarca. Pero al mismo tiempo, ha despertado fuertes críticas de los colectivos ecologistas a cuenta del impacto de la actividad minera en esta zona de la provincia de Sevilla. Y es que la vega del río Guadiamar y los municipios sevillanos de la denominada Faja Pirítica, como se recordará, quedaron marcados por la catástrofe medioambiental derivada de la ruptura de la balsa de lodos tóxicos de la mina que la antigua Boliden-Andaluza de Piritas S.A. (Apirsa) explotaba en Aznalcóllar, un municipio que solo dista unos kilómetros de distancia de Gerena. El Juzgado de Instrucción número 19 de Sevilla, cabe recordarlo, mantiene como imputados a un exdirectivo y a tres directivos de 'Cobre las Cruces' por presuntos delitos de daños continuados y contra el medio ambiente después de que, en 2008, fuesen descubiertas unas 20 perforaciones no autorizadas en el acuífero Niebla-Posadas, explotado por la compañía minera para sus operaciones de extracción de cobre.
El acuífero Niebla-Posadas
Estos hechos, sumados a la detracción no autorizada del caudal de este acuífero y el supuesto vertido de arsénico y otras sustancias contaminantes a este cauce hídrico, motivaron de hecho que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) suspendiera entonces la concesión administrativa otorgada a 'Cobre las Cruces', para el aprovechamiento de este acuífero en cuestión a través de un sistema de drenaje y reinyección de agua (SDR). La mina, no obstante, cuenta actualmente con un Plan Integral de Gestión de Aguas y ha recuperado la autorización correspondiente a la explotación del acuífero Niebla-Posadas, si bien las citadas diligencias judiciales siguen vivas.