El juzgado de lo penal 14 de Sevilla ha suspendido el juicio previsto esta semana por la enfermedad del exalcalde de Morón (Sevilla) Manuel Morilla Ramos, que está acusado de un delito contra el medio ambiente por los vertidos contaminantes al río Guadaíra detectados entre 2003 y 2007.
El exalcalde, que está inhabilitado por otras condenas previas, estaba acusado en este caso por prevaricación medioambiental por omisión y la Fiscalía pedía para él 12 años de inhabilitación para empleo o cargo público, otros dos años de prisión y multa de hasta 30.000 euros.
El juicio estaba fijado para tres días de esta semana, pero finalmente no se celebrará debido al estado de salud del acusado, han informado a Efe fuentes judiciales.
La Fiscalía sostiene que el exalcalde no impulsó ni se preocupó en absoluto de hacer inspecciones eficaces para comprobar si se cumplía la normativa local medioambiental en materia de vertidos al alcantarillado público, donde las industrias del aderezo de aceituna de Morón vertían los residuos contaminantes.
La acusación afirma que el exalcalde tampoco tomó ninguna medida efectiva cuando supo que se realizaban esos vertidos, no ordenó controlar los parámetros de los procesos de explotación de las empresas contaminantes del municipio, que eran numerosas, ni ordenó examinar las arquetas de las industrias que sabía contaminantes para las aguas públicas.
Igualmente, se le acusa de no haber adoptado ninguna medida cautelar como la suspensión de los vertidos a pesar de su notoriedad.
La Fiscalía de Medio Ambiente decidió actuar al comprobar que el exalcalde se mostró pasivo ante los avisos de episodios contaminantes realizados por la empresa Aqualia y silenció todas las denuncias de la Guardia Civil que se realizaron, incluso cuando los agentes del SEPRONA le requerían información sobre el trámite dado por el Ayuntamiento a las denuncias policiales.
Ecologistas en Acción, que ejerce la acusación popular en este juicio, había lamentado la "lentitud" de la Justicia porque se iban a tardar siete años en juzgar esos hechos, así como la "pasividad" de las administraciones, "que ni siquiera se han personado" en este proceso.
La CHG impuso en 2003 por estos hechos multas al Ayuntamiento de Morón por un valor de más de 1,5 millones de euros, "que han tenido que soportar los ciudadanos de Morón con sus impuestos", según ha denunciado Ecologistas en Acción.
En febrero de 2004, los vertidos producidos por las industrias de aderezo de aceituna de Morón causaron la rotura de la depuradora Morón por fallo generalizado de los equipos y la corrosión de los cuadros eléctricos, cuya reparación costó 2 millones de euros a la Junta de Andalucía.