El tiempo en: Chipiona
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Sevilla

Villalobos pide apoyar al sector de patata nueva por empleo que genera

Lo ha dicho en el marco de la acción celebrada este martes por Asaja-Sevilla y Asociafruit para poner en valor a la patata nueva frente a la francesa

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • Fernando Rodríguez Villalobos. -

En el marco de la acción celebrada este martes por Asaja-Sevilla y Asociafruit, repartiendo 2.000 kilos de patata nueva andaluza para ponerla en valor frente a su competidora, la patata francesa de conservación, el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha llamado a "apoyar" a los agricultores sevillanos porque están "en riesgo" unos 70.000 jornales, especialmente en las comarcas de La Vega, El Aljarafe y Las Marismas'.

En la citada acción se ha realizado además una fritada comparativa, para poner de manifiesto que las propiedades gastronómicas y culinarias de las patatas francesas de importación son inferiores, ya que en el proceso de conservación de nueve meses en cámara, la patata francesa convierte su almidón en azúcares, por lo que al freírla se ennegrece y se reblandece, empeorando su aspecto y sabor.

En ese sentido, Villalobos, tras participar en la citada acción, expone que a un par de semanas de finalizar la cosecha de este año de patata nueva andaluza, "seguimos constatando la pérdida de peso que este cultivo viene sufriendo en los últimos años". En concreto, en esta campaña la superficie sembrada en la provincia ha bajado entre un 10 y un 15 por ciento respecto al 2017, explica Villalobos.

El presidente provincial considera "muy necesarias estas campañas divulgativas sobre la patata nueva sevillana, para que la excelente valoración que tiene en el mercado internacional cale también en el mercado patrio". "Los consumidores tenemos que saber que el producto de conservación, más barato y de aspecto exterior artificialmente más bonito, no tiene las mismas propiedades gastronómicas en la fritura, que es como más se come la patata en nuestra tierra".

Además, Villalobos ha compartido también la preocupación de los agricultores sevillanos sobre el precio de la patata nueva sevillana. "De momento, los precios en origen son similares a los de la campaña pasada, en torno a los 0,45 ó 0,50 euros por kilo, pero los profesionales del sector tienen sus dudas sobre si se van a mantener en esta horquilla hasta el fin de la recolección".

UN CULTIVO IMPORTANTE EN LA PROVINCIA Y EN ANDALUCÍA
Al cultivo de la patata nueva, un producto básico en el menú diario de una dieta equilibrada, se dedican en la provincia de Sevilla 3.500 hectáreas (44% del total andaluz), principalmente en las comarcas de La Vega, en El Aljarafe y en Las Marismas. El cultivo genera cerca de 70.000 jornales anuales en la provincia de Sevilla. También se cultivan patatas nuevas en las provincias de Cádiz, Huelva, Málaga y Córdoba, hasta completar las 8.000 hectáreas que se siembran en Andalucía.

Sin embargo, España importa el 70 por ciento de patatas de otros países, fundamentalmente de Francia, lo que está ocasionando una reducción muy significativa de la superficie sembrada, pasando de las 257.000 hectáreas de cultivo registradas en España en 1992, a las 60.000 actuales, lo que supone una reducción del 77 por ciento. En el caso de Andalucía, de 23.500 hectáreas cultivadas en 2004, apenas sí se llega hoy a las 8.000, según datos de ASAJA.

Esta reducción de la producción tiene una consecuencia directa sobre el volumen de empleo. Así, esta caída de la superficie cultivada supone una pérdida, sólo en empleos directos, del equivalente a más de 33.000 puestos de trabajo fijos en los últimos 25 años.

IMPLEMENTAR LA PENETRACIÓN EN EL MERCADO NACIONAL
La patata nueva española es una patata que se recolecta y se comercializa durante la temporada, sin pasar por ningún proceso de conservación, frente a la patata francesa, que se conserva nueve meses a baja temperatura, con la consiguiente pérdida departe de sus propiedades, entre otras, de sus aptitudes para la fritura, principal uso culinario en nuestro país.

La patata nueva española es muy valorada en el mercado internacional, pero tiene escasa penetración en el mercado nacional, en beneficio de la patata importada de conservación, más barata y con aspecto exterior artificialmente más bonito.Por este motivo, ASAJA-Sevilla, junto a Asociafruit, consideran necesario poner en valor el producto nacional, fuente importante de ocupación y de riqueza del agro sevillano.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN