Después de que el pasado mes de agosto el propio alcalde hispalense, Juan Espadas, reconociese que los diversos robos o intentos de robo perpetrados durante el verano podían estar provocando una "sensación de cierta inseguridad" en la ciudadanía, el Subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano, y el edil de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento, Juan Carlos Cabrera, han acordado que la Policía Nacional y la Local analicen semanalmente la seguridad en los barrios de la ciudad para coordinar mejor sus actuaciones y despliegues.
Según el Consistorio, tal es el acuerdo alcanzado entre ambos mandatarios en una reunión celebrada con la presencia de Myriam Díaz, la edil responsable del distrito Norte, en cuyo barrio de Pino Montano se celebraba hace pocos días una multitudinaria concentración en reclamación de más medidas de seguridad, ante un supuesto repunte de los robos similar al experimentado en 2017.
Para el próximo viernes, de hecho, se promueve una manifestación por las calles de Pino Montano para reforzar la reivindicación, según han informado a Europa Press fuentes cercanas a la convocatoria que circularía por las redes sociales.
En cualquier caso, en el citado encuentro se ha evaluado la "sensación de inseguridad" existente en zonas de la ciudad como Pino Montano o la Macarena que, "pese a no corresponderse con los datos de delincuencia que han experimentado un descenso en este último año y que se encuentra por debajo de la media de la ciudad, sí requieren de una respuesta adecuada por parte de las administraciones", toda vez que las estadísticas correspondientes al primer semestre de 2018 reflejan un descenso de los robos en viviendas y establecimientos de Sevilla, sin que tales datos abarquen el periodo estival.
Así las cosas, la Policía Nacional y la Local han acordado un "mando profesional de primer nivel con reuniones semanales de análisis específico de cada uno de los barrios, que determinen cómo deben articularse los dispositivos en función de la realidad de las distintas zonas de la ciudad".
Desde este mando conjunto se planificarán semanalmente en función de las denuncias y los datos recabados de los dispositivos y las actuaciones que se deben realizar en los días siguientes, de forma que se consiga dar una respuesta más coordinada y reforzada en los distintos barrios de la ciudad.
