El Papa ha invitado a los miembros de Acción Católica a no ser "estatuas de museo" y a dejar a un lado "la seriedad formal" para ser personas llamadas por Jesús a vivir y difundir la alegría del Evangelio.
En una audiencia con miembros de la Asociación católica en el aula Pablo VI del Vaticano, Francisco les ha pedido que eviten "la tentación de la calma" y del "intimismo edulcorado, que es desagradable de tan dulce que es", al tiempo que les ha exigido que "no se cierren" porque estas actitudes "no tienen nada que ver con Jesús".
Durante el encuentro, el pontífice ha pedido que los miembros de la Acción Católica tengan "ojos sepan ver más allá de las apariencias" que tengan "orejas que sepan escuchar gritos, susurros y también silencios", que tengan manos "que sostengan que abracen y que curen" pero sobre todo que tengan un corazón "grande y misericordioso que desea el bien y la salvación de todos".
El pontífice ha resumido en tres verbos las actitudes que deben primar en los cristianos "permanecer en Jesús", "ir a las periferias" y "vivir la alegría de ser cristianos" para emprender el camino de la Evangelización.
El Papa ha hecho un llamamiento a los laicos de Acción Católica para "renovar la elección misionaria" que está abierta a los horizontes que el Espíritu indica a la Iglesia y a la "expresión de una nueva juventud del apostolado laical".
Así ha reconocido que son "muchas" las parroquias "marcadas por el cansancio y el cierre", al tiempo que ha manifestado que cuando conoce a un secretario de parroquia le pregunta si es de lo que "abre las puertas, o de las que la cierra". Así ha clamado que estas las parroquias necesitan del "entusiasmo apostólico, de la plena disponibilidad y del servicio creativo".
En varias ocasiones el Papa ha expresado que hay que "dejar las puertas abiertas" de las parroquias para que "al menos, salga Jesús" y ha invitado a "asumir el dinamismo misionario para llegar a todos, privilegiando los que se sienten lejos y los más débiles y olvidados de la población". "Se trata de abrir las puertas y dejar que Jesús pueda ir fuera", ha agregado.
Respecto a este nuevo estilo de evangelización, ha explicado que tiene que estar animado "por una fuerte pasión por la vida de la gente" y estrechamente conectado con los pastores al tiempo que ha llamado a vivir la fe "con alegría" a ser personas que "cantan la vida y la fe".
Francisco también ha hecho hincapié en el tema de la 15º Asamblea Nación de Acción católica que lleva por título "personas nuevas en Jesucristo, co-responsables de la alegría de vivir" para destacar que se inserta bien en tiempo de Pascua porque se trata de la alegría que experimentaron los discípulos al encontrarse con Jesús, "que reclama ser interiorizada dentro de un estilo evangelizador capaz de incidir en la vida".
