El proyecto, bautizado I2HOME y financiado con 2,7 millones de las arcas comunitarias, permite a los ancianos o minusválidos el control a distancia de los diversos aparatos y servicios electrónicos del hogar utilizando sus teléfonos móviles y otros dispositivos.
En particular, se trata de una interfaz del tipo consola universal a distancia, personalizada, simplificada y basada
en las normas técnicas actuales y en constante evolución, explicó la CE en un comunicado.
La interfaz puede ubicarse en un mando a distancia universal, teléfono móvil u ordenador, y puede utilizarse para controlar lavadoras, luces, sistemas de calefacción o aire acondicionado, televisores, lectores de DVD y otros aparatos domésticos.
La vicepresidenta de la CE y responsable de Agenda Digital, Neelie Kroes, destacó que el proyecto financiado por la UE “puede facilitar la vida a todos los ciudadanos de la Unión”, y en particular, “a los ancianos, los minusválidos y las personas con minusvalías visuales”.
Entre otros fines, el sistema puede facilitar a las personas con minusvalías cognitivas tareas como cambiar el canal de televisión.