Los tres fueron declarados culpables de esta muerte el pasado 23 de marzo por un jurado popular que consideró que Pitoño era autor de un delito de homicidio con la agravante de abuso de superioridad, tal y como lo ha estimado el juez presidente de ese tribunal.
Mientras, a los otros dos porteros, Daniel S.S. y David A.A., les ha considerado cómplices de un delito de homicidio por lo que han sido condenados a cinco años.
La sentencia, notificada hoy, señala que Pitoño actuó “de forma consciente, esto es, pudo apreciar el peligro de su acción y de su potencial letal y ello no le hizo desistir de la misma, asumiendo así el resultado de la muerte de su víctima” y califica la agresión de “brutal y despiadada”.