El grupo municipal de Adelante en el Ayuntamiento de Sevilla ha advertido del "colapso absoluto" que se produce en los Servicios Sociales y ha alertado de que carecen de personal para tramitar el nuevo Ingreso Mínimo Vital, "más aún cuando las 23 trabajadoras que tramitan la Renta Mínima de Inserción de la Junta sean despedidas, en poco más de un mes".
El portavoz y la portavoz adjunta de esta formación, Daniel González Rojas y Sandra Heredia, se han entrevistado este jueves con las trabajadoras de la Unidad de Trabajo Social (UTS) de San Jerónimo, donde han podido constatar "la falta de medios humanos y materiales" con que trabaja el personal de los Servicios Sociales.
"Es una pena que en unas buenas instalaciones como son las de San Jerónimo, se note tanto la falta de personal y se observe un mal mantenimiento del espacio, unas dependencias, además, donde se trabaja de cara al público y no hay la más mínima medida de seguridad destinada a evitar contagios por coronavirus. Las trabajadoras no disponen de medios informáticos adecuados y tienen que tomar nota a las personas que atienden a través de una tabla de Excell", ha señalado González Rojas.
El portavoz de Adelante Sevilla ha criticado que cientos de familias que hace meses que solicitaron la RMI de la Junta van a tener que "empezar de cero todo el proceso burocrático" para acceder al Ingreso Mínimo Vital. González Rojas ha insistido en reforzar la plantilla de estos Servicios Sociales al tiempo que ha vaticinado que la situación de colapso "va a acentuarse en los próximos meses, porque en Sevilla son miles los vecinos y vecinas que tienen derecho a esta nueva prestación".
Heredia, por su parte, ha incidido en la idea de que si no se destinan más recursos humanos y materiales, los Servicios Sociales "se van a convertir en un cuello de botella". La portavoz adjunta ha recordado la situación "desesperada" que se vive en muchos barrios y que se ha visto agravada por los efectos económicos y sociales de la emergencia sanitaria.
La portavoz adjunta ha tildado de "mezquino" al gobierno autonómico por "suprimir la Renta Mínima de Inserción en cuanto tuvo conocimiento de que el Gobierno central iba a poner en marcha una ayuda económica para las familias más vulnerables". Heredia también ha señalado que es un "sinsentido" que, siendo conscientes de las carencias existentes y de la avalancha de solicitudes que está por llegar, se despida a unas trabajadoras que realizan una "función indispensable".